Estamos a pocos días del pitazo inicial para el Mundial de Clubes. La última cita del año para varios equipos que buscarán una copa que se juega anualmente para definir al campeón de campeones de las diferentes confederaciones del fútbol.
Es el sueño máximo para algunos por la oportunidad de ganar, mientras que para otros será la oportunidad dorada de aparecer en el mapa del fútbol mundial y ganarse las menciones de todos los medios y de muchos fanáticos a lo largo y ancho del globo.
Sin embargo, la fiesta dura muy poco, pues por el reglamento de competencia, algunos clubes se tienen que eliminar desde el inicio y otros esperan rivales en las rondas de semifinales. Esto basado en los rankings en los que están categorizadas las confederaciones.
Para nosotros y para algunos, la competencia debería de ser “todos contra todos”, para que los equipos tengan la misma cantidad de juegos para buscar el título. Quizá no sea por justicia, pero sí por algunos motivos que acá exponemos.
Exposición
Todos los clubes que llegan al Mundial de Clubes quieren levantar la copa basado en un esfuerzo de enfrentar a todos los competidores. Sectorizarlos los hace perder la ilusión de enfrentar a todo el universo disponible.
Todos los clubes que llegan al Mundial de Clubes quieren levantar la copa basado en un esfuerzo de enfrentar a todos los competidores. Sectorizarlos los hace perder la ilusión de enfrentar a todo el universo disponible.
Oportunidad
Cada jugador de cada equipo espera poder medirse contra las distintas formas de juego que se tienen en el mundo. No se juega igual en Asia que en África o América. Lo justo sería enfrentarse a todos los estilos de juego.
Cada jugador de cada equipo espera poder medirse contra las distintas formas de juego que se tienen en el mundo. No se juega igual en Asia que en África o América. Lo justo sería enfrentarse a todos los estilos de juego.
Más taquilla
Increíblemente, uno de los atractivos para los organizadores es poder vender bastante taquilla, al jugarse en el actual formato se acortan los márgenes de poder ver a un equipo a 2 o tres partidos.
Increíblemente, uno de los atractivos para los organizadores es poder vender bastante taquilla, al jugarse en el actual formato se acortan los márgenes de poder ver a un equipo a 2 o tres partidos.
Los mejores frente a frente
Así como está pactado el actual formato de competencia, la única forma de ver jugar por ejemplo al América de México, contra el River Plate de Argentina, sería en una final. Cuando tendría más atractivo ver a ambos enfrentarse en el camino a una final y que ambos igual jueguen contra el Barcelona, representante de Champions League.
Así como está pactado el actual formato de competencia, la única forma de ver jugar por ejemplo al América de México, contra el River Plate de Argentina, sería en una final. Cuando tendría más atractivo ver a ambos enfrentarse en el camino a una final y que ambos igual jueguen contra el Barcelona, representante de Champions League.
Mejor formato para medir goleadores
Pongamos de ejemplo a Luis Suárez, un goleador nato del Barcelona, que tendrá menos minutos para buscar la oportunidad de hacerse con el título de goleo de la competencia. Si el uruguayo tuviera más minutos disponibles con un formato todos contra todos, sus posibilidades de ganar el título de goleo serían mejores.
Pongamos de ejemplo a Luis Suárez, un goleador nato del Barcelona, que tendrá menos minutos para buscar la oportunidad de hacerse con el título de goleo de la competencia. Si el uruguayo tuviera más minutos disponibles con un formato todos contra todos, sus posibilidades de ganar el título de goleo serían mejores.
Como es lógico, a los clubes lo menos que les interesa es “gastar” energías en esta competencia. Entre más rápido se resuelva mejor, pero para nosotros los fanáticos, sería mucho más interesante ver a los clubes disputando un partido contra todos los rivales y definiendo todo en base a supremacía y no tanto en choques directos en donde se omiten algunos rivales “fuertes” o similares que pueden ofrecer más espectáculo.
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